En un encantador pueblo costero en el sureste de la isla, a poca distancia de una de las más bellas calas, se encuentra esta casa rústica de dos plantas, orientada al sur, típica menorquina de 200m2 construidos sobre una parcela, dividida en varias tancas, con un total de 4204m2.En la entrada de a finca hay una zona privada de parking para varios vehículos. Pasando por un cuidado jardín de cactus con pozo se llega a la vivienda, cuya fachada principal esta dominada por un amplio y imponente porche con arcos. El porche está dotado de ventanas y puertas acristaladas para cerrarlo por completo en invierno y mantenerlo abierto en verano. En la planta baja encontramos el salón-comedor con chimenea, la cocina típica de una casa rural, dos dormitorios, un doble y uno individual y un baño. La primera planta se divide en dos dormitorios, uno individual y uno doble, ambos con salid a una amplia terraza con hermosas vistas sobre el campo y la mar, y un baño.Como es típico en Menorca, las paredes de la casa son de marés, las vigas de madera, y el suelo de baldosas de terracotta. La vivienda tiene aire acondicionado y luz de la red eléctrica. Al lado derecho hay una segunda edificación que alberga un estudio y el lavadero. Detrás de la casa hay una zona de recreo con saffreig (depósito de agua) para bañarse, ducha externa y barbacoa.A continuación, se encuentra una edificación que actualmente se utiliza como trastero, dividido en tres segmentos, que tiene el potencial de convertirse en una casita adicional para invitados. La propiedad cuenta con 6 tancas con tierra para cultivo, y tiene pozo propio para el abastecimiento de agua.Una gran oportunidad para los amantes de la vida rural que no quieren renunciar a su confort y que aprecian la cercanía del mar. Para el verano o para todo el año. Recomendamos una visita a esta preciosa propiedad en un lugar privilegiado.